Algunas mañanas viajo a mi lugar de trabajo con un…
El garjao de Colón
La verdad es que, aunque me haya quedado un poco farragoso, me ha encantado escribir para ABC el artículo de hoy sábado, titulado “El garjao de Colón” porque me ha servido para aclararme algunas cosas que tenía sobrevolando la cabeza, como esos charranes que me gusta observar cuando navego, con las alas al trasluz transparentes, mirando fijamente el mar para lanzarse de pronto en picado, cerrando al final las alas, para después volar sobre el océano hacia el horizonte, chirriando como grillos del cielo.