7:04 del Lunes 19 de Enero de 2009
Me asomo y todavía es de noche a estas horas de la mañana. Tampoco se oye el viento que ayer sopló con fuerza y, con el miedo de que cayera, quité el coche de la sombra de la única mimosa que me queda.
Me asomo y todavía es de noche a estas horas de la mañana. Tampoco se oye el viento que ayer sopló con fuerza y, con el miedo de que cayera, quité el coche de la sombra de la única mimosa que me queda.
Mónica Fernández-Aceytuno