Como si un mago lo hubiera partido en dos y…
Avocetas
Cuando nos envió esta imagen Stephen Daly, ya nos quedamos impresionados con la belleza de la avoceta en vuelo, por su plumaje pío, blanco y negro, limpísimo, y su pico curvo como el de la aguja de coser los sacos.
Nos contó Stephen que la foto fue tomada en un día muy tormentoso en Las Salinas de Bonanza (Cádiz).
Suele ser precisamente a las salinas donde se dirigen cuando llegan de los Países Bajos…
Lo que está pasando es que han llegado
desde los Países Bajos
para pasar el invierno en el Delta del Ebro
las avocetas.
Son limnícolas
que en vez de tener el pico recto para buscar en superficie o en profundidad el alimento,
se han especializado en el que flota en la columna de agua,
donde parecen tomar muestras gracias a esa curva del pico
que, además, tiene sensores táctiles.
Es en las salinas donde se ve a la población invernante,
con su plumaje pío,
blanquinegro,
limpísimo.
Hasta los párpados los tienen blancos igual que el mirlo acuático
como si
para ver bajo el agua
tuvieran que estar los ojos cubiertos de inocencia.
Según Curcó, les llaman cusisacs,
cosesacos,
por recordar su pico a la aguja curva con la que se cosen los sacos.
Se podría escribir que las avocetas cosen al agua.
O que hacen pespuntes
cuando cosen
la curva del sol por la tarde.
Mónica Fernández-Aceytuno
Texto para el microdocumental AVOCETA
emitido en el cierre de Naturaleza
de “La Noche en 24 horas” (10-11-2015)
Ha hecho la avoceta de la belleza y de la gracia de su pico su modo de vida.
Saludos,
Mónica