Lo primero que he hecho esta mañana es mirar al cielo por si hubieran llegado, como suelen hacer para la entrega del premio Cervantes, los vencejos.
Una de las cosas que más me llama la atención de la entrega de este premio es, precisamente, el sonido de fondo tan característico de los vencejos, que ya definimos como trisar para el diccionario de la Naturaleza:
trisar.
Chirriar al pasar en vuelo los vencejos y las golondrinas, con un sonido que es como un trizar de cristales en el cielo.
Como cada año:
Yo no entiendo por qué la lectura pública del Quijote no empieza por el prólogo, siendo también de Cervantes. Leo: “Desocupado lector…” y me emociono porque nos habla a cada uno a través de los siglos.…Leer más del fondo de artículos CERVANTES
Buen día,
Mónica