18:34 del Domingo 7 de Diciembre de 2008

Podía haber esperado a mañana, pero ha sido hoy cuando me he encontrado por vez primera lo que se llama vulgarmente “Spaguetti de monte”, o mejor dicho: Clavulina rugosa.

18:45 Seguramente acaba de emerger de entre las acículas del pinar, porque es la primera vez que la veo en la ruta que hago, siete kilómetros, casi cada día.

Iba pensando mientras caminaba que no vale aquí de nada salir a buscar la noticia, ir a fotografíar setas, por ejemplo, porque al llegar puede que se hayan muerto de frío, sino que es más bien lo que te sale al camino lo que hay que reflejar, lo que encuentras sin ir a buscarlo.

Entonces vi por vez primera, a eso de las doce de hoy, este extraño hongo, de un blanco fosforescente entre la pinocha y las hojas lobuladas del roble, pequeño, diminuto, aquí y allí por el suelo, parecen corales que le hubieran salido al fondo del bosque.

Casi refulge esta clavulina entre la oscuridad de la hojarasca mojada por la lluvia de las últimas horas y que es, probablemente, la que ha hecho fructificar a este “spaguetti de monte”,un hongo, ya lo insinua el nombre, comestible.

Podía haber apartado las hojas para que se viera mejor que no tiene un pie diferenciado, que es largo y delgado como un fideo, pero es así como lo encontré, saliendo de entre las acículas, y así debe salir en la foto, la cual puede verse más de cerca pinchando sobre ella.

Hoy ha hecho un día cálido y precioso. Feliz tarde y hasta mañana,

Mónica Fernández-Aceytuno

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