17:46 del Lunes 8 de Diciembre de 2008

Decía Camilo José Cela que el tojo era la flor más gallega. Alumbra los montes de amarillo cuando los días son más oscuros aunque, en vez de hojas, tiene pinchos.

17:48 “Los paisanos gallegos lo saben y se acercan con guantes y con fouciña, y con botas que el tojo atraviesa. Se arañan las muñecas mientras las flores caen al suelo y el tojo, recién cortado, se dispone a cicatrizar y retoñar, para encender los montes al año.

En Galicia lo que no es monte es leira, o tierra de labor, hasta donde llevan el tojo en carros. Antes, pasa por las cuadras, donde será cama de pinchos verdes para las vacas. Los campos de maíz lo esperan como abono estos días, mientras languidecen entre miles de zorzales que cantan.

Llueve en Galicia. Es una lluvia que no moja: arropa. Y ha iluminado ya todos los amarillos: el de la flor del tojo, las mimosas y la base verde del trigo que amarillea también ahora. Desde que la luz del invierno no toca la tierra donde espiga”.

Esto no lo escribió Cela, claro, sino yo, hace catorce años. Porque hoy no escribo, que es fiesta. Pero la foto, la foto del tojo recién florecido, sí que es de esta mañana.

Feliz tarde,

Mónica Fernández-Aceytuno

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