Pensé ayer, cuando pescamos este calamar y aún no había echado la tinta que vuelve negra el agua marina del cubo, que
Son numerosas las aves como los zorzales y los mirlos que pican la fruta en la rama sin llegar a tirarla al suelo, y así fotografió esta granada, o lo que queda de ella, Pilar López, pero en cualquier frutal donde ahora miremos
Son numerosas las aves como zorzales y los mirlos que comen la fruta en la rama sin llegar a tirarla al suelo, y así fotografió esta granada, o lo que queda de ella, Pilar López, pero en cualquier frutal donde ahora miremos podremos observar incluso la marca de los picotazos porque así como cada especie tiene un plumaje y un canto, posee también una manera específica de comer los frutos, la cual delata su presencia, aunque se haya ido volando.
Si debajo de esta granada, estuvieran sus semillas, lo más probable es que hubiera sido comida por uno de esos estorninos o zorzales que solo comen la pulpa, porque el hueso y la semilla no les interesa como a los picogordos, que dejan la pulpa y buscan, para partirlo en dos, el hueso, la semilla o la almendra.
Si hubieran sido fringílidos, se vería esparcida por las hojas la pulpa de la granada, ya que ellos lo que quieren es también la semilla, y así como detectives, acabaríamos averigüando qué pájaro dejó así este fruto.
Yo por aquí estoy viendo a los cuervos y los arrendajos llevarse las castañas en el pico para trabajarlas en algún comedero escondido entre los helechos.
No dejen de observar la fruta en las ramas estos días, higos, manzanas y granadas nos hablan de las aves que los visitan cuando ya se han ido.
Que pasen un feliz día,
Mónica Fernández-Aceytuno
P.S.
A raíz de mi opinión en un artículo que escribí este verano sobre los incendios, recibo esta carta que, por su interés, difundo, y sirve además de punto de partida para un debate necesario:
¿Qué hacemos con los montes?
Pueden enviarnos su opinión a:
aceytuno@terra.es
Y a partir de la semana que viene, tras rellenar un sencillo registro, podrán incorporar su parecer directamente.
Todas las opiniones son bienvenidas.
Y esta es la de José Elorrieta Jove, a propósito de un comentario que hace a Iñaki Iriarte-Goñi sobre su libro:
“LA OBRA DE OCTAVIO ELORRIETA(1881-1962). EL MONTE AL SERVICIO DE LA ECONOMÍA”
Comentario del que nos hace partícipes.
PINCHE AQUÍ PARA LEER UN EXTRACTO DE LA CARTA DE JOSÉ ELORRIETA JOVE