Te envío una foto que hice hace dos días en la finca donde vivo, muy cerca del Embalse de Rosarito (Toledo-Ávila).
Jorge Sierra
Jorge Sierra
Buenas. ¿Qué tal empieza por ahí el día? Por el sur nos ha contado Joaquín, agricultor, que tienen hoy tal sequía que están los tractores arando la tierra para los cereales de invierno entre una gran nube de polvo.
Dice que no recuerda nada igual desde los años cuarenta.
Ese rastro polvoriento, no anuncia nada bueno, al contrario que cuando van los estorninos volando tras el arado, una bandada de diez o veinte pájaros que tienen una silueta oscura y en cruz y que lo mismo vuelan muy al ras del tractor que se quedan un rato en la tierra comiendo los insectos de saldo, y los que asoman, tras abrir el tractor la tierra.
En otros lugares con mas agua, como los arrozales del delta del Ebro, son las garcillas e incluso las gaviotas las que siguen a los tractores.
Que no haya pájaros sobrevolando esta escena fotografíada por Joaquín esta misma semana, nos dice mucho de lo seca y empobrecida que está hoy la tierra.
Que pasen un buen día.
****
Les dejo hoy con la CARTA DE JOAQUÍN en el TABLÓN DE LOS USUARIOS, y con los Milanos del Paramés, donde al contrario que en Andalucía, prefieren los agricultores que en otoño, para la siembra del cereal, no llueva.
MILANOS EN EL PARAMÉS
Termina esta semana un otoño al que le dio por disfrazarse de primavera. Un otoño de sol y poca agua que han hecho de éste el mejor año del Paramés. Ya lo dicen los labradores:”Si corren los ríos Sequillos en San Andrés, mal año en el Paramés”.
En el Paramés palentino el cielo y la tierra compiten por vel cúal es más inmenso y el trigo, que ya verdea, se agarra a la tierra para mezclarse con el cielo.
La siembra de primera ha sido un éxito. Otros campos se terminan hoy de arar para el barbecho. El hombre abre el suelo y el sonido de la máquina llama a la naturaleza. Estorninos y avefrías recogen los invertebrados y ratones sorpendidos por la luz.
Y por encima, los milanos reales, recién llegados de otros paisajes europeos sin los horizontes inabarcables del Paramés, de lugares donde dudan que exista el infinito.
Mónica Fernández-Aceytuno
Cambio 16
Diciembre 1994