Cigüeñas

En árabe la cigüeña se llama “El Haj Kacen” -el peregrino que viene de la Meca- pero desde los años 80 aumenta la población de cigüeñas sedentarias que no migran a África porque a este lado del Estrecho se tira, todavía, mucha comida.

El hambre hace volar, lleva lejos. Las cigüeñas iban y venían por razones tróficas, nunca porque hiciera frío, o calor, sino para alimentarse de langostas y saltamontes en Malí, o en Zimbawe, como parece que hacen todavía los individuos más jóvenes, a ocho mil kilómetros del campanario del pueblo donde nacieron.

Regresan estos días con el viento del NO. Se ven pasar muy altas por encima del monte Hacho, en Ceuta.

Vuelan con el cuello estirado, como queriendo llegar pronto, y con las plumas llenas de arena.

Cigüeñas / Juan Carlos Delgado Expósito

Cigüeñas / Juan Carlos Delgado Expósito

Cigüeña blanca / Juan Carlos Delgado Expósito

Cigüeña blanca / Juan Carlos Delgado Expósito

Cigüeña blanca/ Juan Carlos Delgado Expósito

Cigüeña blanca/ Juan Carlos Delgado Expósito

Cigüeñas al atardecer en Vadancho / Aceytuno

Cigüeñas al atardecer en Vadancho / Aceytuno

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Hay 2 comentarios para este artículo
  1. Juan Carlos Delgado en 5:57 pm

    Muchas cigüeñas extremeñas se han vuelto sedentarias, ya no se marchan y pasan todo el año con nosotros, una suerte para los que amamos a las aves. En Fregenal de la Sierra (Extremadura), andan ya las cigüeñas en sus nidos acarreando material para reponer los desperfectos de los temporales. Se roban material de unos nidos a otros y hay disputas por ello; y también desde hace semanas se entregan a sus amoríos realizando las cópulas para perpetuar a la especie.

    Saludos desde Fregenal de la Sierra, Extremadura, tierra de cigüeñas.

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