EL VIENTO

ACTUALIDAD NATURAL

MÓNICA FERNÁNDEZ-ACEYTUNO

ABC, Lunes 13-11-2000

EL VIENTO, ESE INÚTIL METEORO

De la lluvia, quiero todas sus formas. La lluvia de invierno, la de otoño, y esa tan olorosa de la primavera. Me gusta la lluvia en el parabrisas y en la cara y en el pelo, y sobre mi casa que, de noche, parece una casa de lluvia iluminada con luz de luciérnaga.

Pero qué poco me gusta el viento, ese inútil meteoro. Anoche regresó a Galicia por el suroeste, y quiso llevarse los eucaliptos a la luna, esta luna llena de noviembre, la de los brazos extendidos, la que duerme la savia de los árboles. Como si el aire estuviera teñido, puedo ver que se trata esta vez de un viento más débil, pero racheado, que es el peor viento. ¿Para qué has vuelto?, si ya la atmósfera estaba limpia. Hacías falta cuando era necesario clarear los montes, y tirar al suelo las ramas enfermas; y, sí, es el tiempo de esta tarea, ya lo dice la luna, y lo dicen los carpinteros, que ahora la savia retrocede hasta las raíces. Pero ¿qué haces tú corriendo por los campos donde no queda en pie una encina?, ¿no te das cuenta de que ya no hay bosques y que el árbol que pretendes podar en la ciudad ya se encarga el ayuntamiento de mutilarlo?

Y a mí, que estaba viendo el mejor otoño de mi vida, con los robles de un rojo pruno, y los castaños amarillentos, me has dejado sólo una alambrada de ramas. El otoño está hoy en el suelo, por culpa del viento, ese inútil meteoro.

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