Dos veces en mi vida de pajarero, he tenido la gran suerte, y les aseguro que es verdaderamente una suerte, ver cazar a un gavilán, no es fácil.

J.Carlos Delgado Expósito

Dos veces en mi vida de pajarero, he tenido la gran suerte, y les aseguro que es verdaderamente una suerte, ver cazar a un gavilán, no es fácil.

Juan Carlos Delgado Expósito

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NOTA DE LA EDITORA:

Para mí es una maravilla, y un verdadero honor, editar los textos que llegan a nuestra redacción, auténticas joyas recién recolectadas de la Naturaleza, como estas crónicas que nos envía Juan Carlos Delgado Expósito, y también hoy Pilar López sobre sus últimas observaciones por las TIERRAS DEL SURESTE.

Quiero desde aquí animarles a todos los que deseen compartir lo que ven, aunque no sepan bien de qué se trata, con nosotros. Para ello, a finales de este mes, dispondremos de una herramienta por la que cada usuario podrá incorporar él mismo todo el material que desee y que se verá no sólo aquí, en www.aceytuno.com, sino en el CANAL DE LA NATURALEZA de ABC.es.

Seguiré pues, más que como editora, como lectora de todo lo que acontece a nuestro alrededor y también escribiendo de vez en cuando, aportando lo que observe; aunque lo que más me gusta es ir leyendo lo que nos cuentan aquí cada día las personas que viven y aprecian la Naturaleza.

Gracias a todos y que pasen un feliz día,

Mónica Fernández-Aceytuno

EL GAVILÁN

“La actitud del gavilán está llena de gracia y vivacidad; su expresión denota enorme curiosidad e inteligencia. Y es valiente y temerario…”

Así describía el Dr. Félix Rodríguez de la Fuente, al gavilán (Accipiter nisus) .

El que se ve en la fotografía me lo entregaron, herido en su ala izquierda, con el hueso seccionado, aún no se si por un disparo o por el enganche en una alambrada de espinos, de la que aún proliferan por nuestros campos. El ave será entregada a un centro de recuperación y veremos qué pasa.

Son los gavilanes especialistas en cazar aves pequeñas, tipo mirlos, zorzales, carboneros y otras avecillas que se mueven por las zonas boscosas donde, también nidifica la rapaz. En definitiva su dieta es ornitófaga, como la denominan los expertos.

Dos veces en mi vida de pajarero, he tenido la gran suerte, y les aseguro que es verdaderamente una suerte, ver cazar a un gavilán, no es fácil, en mi caso han sido lances que observé casualmente. Y les aseguro que apenas da tiempo a ver la persecución de la rapaz sobre su presa.

SIGA LEYENDO AQUÍ A JUAN CARLOS DELGADO EXPÓSITO SOBRE EL GAVILÁN