Buenas de nuevo. Gracias al biólogo Juan Manuel Salazar, supimos que es habitual la presencia de orcas en el estrecho de Gibraltar, donde es corriente

Buenas de nuevo. Gracias al biólogo Juan Manuel Salazar, supimos que es habitual la presencia de orcas en el estrecho de Gibraltar, donde es corriente que las orcas aprovechen las pesquerías para alimentarse de los atunes cuando entran en primavera a desovar al Mediterráneo, o que salen al Atlántico tras la freza.

A propósito de este asunto, me contaron en una ocasión que llaman la “dentrecha” al mordisco que da la orca en el abdomen del atún, justo donde lleva las huevas cuando va de ida; pero no me he vuelto a encontrar con esta palabra.

No descarto que me pudiera equivocar yo al tomar nota, pero sería extraño, pues cuando se trata de términos que jamás he oído, insisto mucho en corroborarlos, y más para el periódico impreso, antes de poner una palabra rara en letras de molde.

Así que me quedo por ahora con la duda de si se dice “dentrecha” a ese primer mordisco que da la orca en el atún. Mientras tanto, por aquí ha amanecido hoy un día bastante gris, aunque no llueve, y tengo intención de acercarme esta mañana a la orilla del mar para grabar las olas.

Que pasen un feliz día.

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P.S. Hoy, en el TABLÓN DE LOS USUARIOS una noticia del buitre, por el Dr. José Fidel Fernández, y una invitación de la Sociedad Española de Ornitología para observar las aves en Aragón, y la recomendación de V.J.Hernández sobre un manual de Etnozoología.

Por mi parte, dejo aquí las orcas y su “dentrecha”. Hasta mañana.

MANADAS DE ORCAS CORTAN EL PASO DE LOS ATUNES

Ayer por la tarde, con el viento suave de poniente, varias manadas de orcas realizaban rutas a varias millas de la costa entre Tarifa y Ceuta, siempre en el centro del Estrecho de Gibraltar, donde se espera en las próximas horas el regreso hacia el Atlántico del Atún Rojo, informa Juan Olmedo, presidente de la almadraba de Ceuta.

Los atunes son parte de la dieta de la orca y todos los años acuden varias familias a esperar el paso de los grandes atunes.

Cuando van de ida, hacia el Mediterráneo, las orcas adultas los rodean y asaltan con un primer mordisco-“la dentrecha”-en el abdomen, justo donde los atunes llevan las huevas, como si fuera un tesoro.

Ahora, para el regreso del Atlántico, los atunes rojos ya han frezado y vienen muy débiles y escasos de peso y, aún así, las orcas les aguardan y cortan ya el paso de vuelta.

La orca-Orcinus orca-es el más grande de los delfínidos, un cetáceo odontoceto inconfundible por el diseño blanquinegro de su cuerpo. En el año sesenta antes de Cristo, una orca embarrancó en las aguas del puerto de Ostia, cerca de Roma, cuenta Plinio en una de sus historias.

Ayer, varias manadas esperaban a los atunes rojos en el Estrecho, con el viento de poniente, el cielo cubierto y el mar en calma.

Mónica Fernández-Aceytuno

ABC, Viernes 11-7-1997