Qué día más bonito tuvimos hoy. Qué luz de invierno. Y qué bien se transparentaban, al sol, las alas de los charranes.
Mónica Fernández-Aceytuno
Mónica Fernández-Aceytuno
Empezando la Semana Santa.
Posted on April 17, 2011 by Buceo la Restinga
Muy buenas en el Cuaderno de Bitácora de Buceo la Restinga en El Hierro.
Pues sí, andamos de Semana Santa, la verdad que ha venido bastante gente a bucear. Dos días atrás hizo unos días preciosos, buen sol, mar en calma como hacía tiempo no se habia visto y un agua a 20 grados, que pa mi es mas bien fría.
Esta mañana todo se ha girado, se ha pasado la noche lloviendo, esta mañana oleaje y día gris. Nos hemos echado unas risas volviendo con el barco, ¡¡¡ qué olas hacian pasando Punta Miradero !!! Creeemos ya esta calmando, este es un frente suave, no como el Delta de hace un par de años.
Ayer por la tarde fui con Nunu y con su gente al Bajón, fue esa un inmersión espectacular, de esas que gritas debajo del agua, del chorro de emociones que llegan directos a tú corazón, de considerarte inmerso en la belleza de la naturaleza, el sentirse un mero espectador que interactúa con el medio, pero un espectador de lujo. Empezamos con la pared que mira al este, como casi siempre, por ahí no se veía mucha cosa, más bien flojo. Como la mayoría de las veces la “fiesta” estaba en la cara oeste. Cuando cambiamos de cara (de la este al oeste) yo baje un poquito más que Nunu, hasta unos -40 metros. En la relativa soledad de fondo acuático me topÉ con un banco inmenso de Sargos Breados (Diplodus cervinus cervinus), en su oscuridad, que iban acompañados de Galanas (Oblada melanura). Al mirar hacia arriba y ver los buzos desde su pequeñez pude observar en la superficie dos grandes medregales (Seriola dumerili) que iban nadando hacia mar abierto alejandose de nuestra presencia. Al volver a mirar al frente me topo con otros dos que empiezan a dar vueltas para observarme, no se si de manera amistosa, o comprobando qué tipo de bestia soy, lo que anda claro es que de mi no se fían. Uno pesara unos 25 kilos el otro unos 7 u 8 kilos. El grande es el más “chulo” pero el primero que se retira a las profundidades, el segundo se queda conmigo como unos cinco minutos, dando vueltas sin parar, acercandose, alejándose pero siempre usándome como punto de referencia en ese circular navegante. Vuelvo a alzar la cabeza para buscar a Nunu y cuál es mi sorpresa cuando me topo con un banco de Gallos (Canthidermis sufflamen) inmenso, el cielo se llena de puntitos alla arriba, parecen estrellas con vida, a este banco se suma el clásico de Chopones (Khyposus sectator) siempre presentes en el Bajón. Eso parecia una manifestación. Mas bancos se unieron a la fiesta, pero estos estaban a mi profundidad, Sargos, Galanas, Chopones, Gallos, Medregales, luego vinieron las Bicudas (Sphyraena viridensis) para sumarse a última hora un par de meritos mas bien “parejos” como se dice por aqui, que quiere decir grandes. Uno mas de 20 kilos tenia y el otro es el clásico en nuestras inmersiones, el mero-perro ya que siempre viene buscando algo. Algunos dicen que les damos de comer, pero que yo sepa nadie lo hace y eso es por una sencilla razón: son mas fáciles de pescar. Si escribiendo esto ya estoy disfrutando imaginarse ahí abajo, se creó una energía en mi pecho de satisfacción, de alegría, de poder estar ahi, en mi soledad acompañada dentro de ese marco, como un bodegón viviente, donde algunos de esos animales vienen a verme, no se si a saludarme pero lo que esta claro que si alguna vez en esta mi vida me quedo solo (cosa que dudo mucho); ya se donde puedo morirme acompañado.
Saludos desde “el peñasco”.
Cristóbal