La ornitóloga Cristina Parques vive justo en mitad del Estrecho, en Bujeo, cerca de Tarifa, y estaba hace tres días en el jardín y pasó un grupo de cigüeñas, unas cincuenta y cinco, tan cerca del tejado de la casa que no hacía falta prismáticos para verlas. Venían del mar, y se iban hacia la montaña, cogiendo una térmica de encima de la casa y se lanzaron hacia el monte, como vuelan las cigüeñas, con el cuello estirado como queriendo llegar pronto.
De los milanos negros pasó un grupo de quinientos, con su cola ahorquillada, y también en grupo y tan bajos que se distinguían perfectamente.
Las cigüeñas, empiezan a verse en noviembre de regreso, pero de aquí a febrero es cuando más se ven pasar y después, según Cristina, llegarán los alimoches, y nos lo contará aquí el día que pasen.
Hoy está nublado pero con nubes altas en el cielo, como cigüeñas que vuelan bajas.
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