Helecho

8:18

No hay que confundir una espiral con una hélice.

Ha vuelto a helar, lo cual se podría interpretar como una vuelta del invierno, pero la vida es una hélice, una espiral que avanza, y aunque parezca que da vueltas, en realidad estamos en otro punto de la vuelta de tuerca.

Esto que vemos en la foto es un helecho, ayer, emergiendo de la tierra, plegado en espiral, igual que nuestra galaxia, pues gira y se despliega en un mismo plano.

Si tomáramos el extremo del helecho y lo empujáramos hacia arriba o hacia abajo, a la manera en la que avanza un sacacorchos, entonces tendríamos una hélice, como cada una de las hebras de la doble hélice del ADN.

Y es curioso porque el tiempo traza unas curvas muy parecidas, yo diría que exactas, a las curvas de la doble hélice de ADN, como si el tiempo y la vida estuvieran unidos también por su arquitectura, muy similar a la estructura de una escalera de caracol llena de espirales que avanzan.

Por eso ni el tiempo ni la vida dan vueltas como siempre se ha venido diciendo, sino que dan giros en hélice de tal manera que si te vuelves a encontrar es siempre de lejos, y con el eco en la voz del hueco de una escalera.

Feliz día,

Mónica Fernández-Aceytuno

P.S. A partir de esta semana se reanudan los avistamientos de orcas en el Estrecho de Gibraltar, de los que daremos aquí cuenta, con video, fotos e información de primera mano. Vuelven las orcas tras los atunes. De nuevo la vida dando vueltas, no en círculos, sino en hélice, en una espiral que, irremisiblemente, avanza.

Por otro lado, este es un portal de la Naturaleza que hacemos entre todos, por lo que quiero de nuevo agradecer la participación de los usuarios, cuyas valiosísimas aportaciones pueden leer pinchando en el TABLÓN DE LOS LECTORES.

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