Todo en el desierto del Namib está donde debe estar:…
Ovicápsulas
Me pareció curiosísimo cuando encontré sobre esta caracola, buceando hace unos días en Morrocoy (Venezuela), esa suerte de lágrimas endurecidas que tenía sobre el periostraco.
Inmediatamente me acordé de la imagen que desde Argentina nos envió Marisa cuando se produjo en las playas del Mar del Plata la llegada masiva de ovicápsulas de unas caracolas llamadas Volutas negras (Adelomelon brasiliana) que realizan la puesta de huevos, cápsulas traslúcidas llenas de caracolas en miniatura a la deriva y que en ocasiones, como en esta, acaban en las playas.
En menos de media hora encontré seis caracolas grandes como una mano, todas vacías, pero al menos una tenía estas ovicápsulas, diferentes a las argentinas, puesto que no iban libres a la deriva sino que se adherían a las caracolas vacías de una especie que me parece también es de la misma familia Volutidae aunque las ovicápsulas fueran en este caso más pequeñas, del tamaño de una avellana, y con una sola miniatura de caracola dentro.
Pregunté a Rafael, el chico que nos llevó de playa en playa con su lancha por Morrocoy, si sabía el nombre de la caracola y me dijo que le llamaban voluta y que la gente se las comía, de ahí que encontrara buceando, en una zona relativamente pequeña, tantas vacías.
Lo curioso es que no estaban en la orilla sino en la parte más azul oscura del agua, donde también había praderas de hierba de las tortugas (Thalassia testudinum) como si se dieran las caracolas entre ellas.
¡Qué maravilla fue poder observar todo aquello!
Saludos,
Mónica