Al abrigo de las oquedades del viejo roble, el cárabo está presente ante nuestra mirada, pero aun así, nos resultará siempre oculto y casi invisible.
Juan Carlos
Al abrigo de las oquedades del viejo roble, el cárabo está presente ante nuestra mirada, pero aun así, nos resultará siempre oculto y casi invisible.
Juan Carlos
Juan Carlos