PLÁTANOS

LOS PLÁTANOS PODRÍAN MORIR DE VIEJOS

El dolor por el paso del tiempo es igual para todos: damos vueltas y volvemos justo en frente de donde estuvimos, en una espiral que se parece a la de nuestra galaxia y que nos aleja de lo que fuimos, de lo que tanto quisimos , y nos acerca a lo que seremos. Un árbol de hoja caduca, en primavera, es como un repetidor de curso: no por rehacer otro año todo el ciclo deja de cumplir años.

Pero hay árboles que pueden cumplir tantos años que, cuando se introducen en otro lugar, cuando se les da otra casa, en varias generaciones nadie los ve morir de viejos. Este es el caso del plátano –Platanus hispánica- que vive en el Jardín del Príncipe de Aranjuez y que es plátano padre de muchos otros plátanos que se plantaron hace doscientos años. Según Mariano Sánchez, del Jardín Botánico de Madrid, el plátano padre tiene hoy unos 219 años.

Un plátano de esta especie puede llegar a los cuatrocientos años, es decir, suponiendo que los plátanos sobre los que escribió Alfonso Ussía esta semana sean hijos del plátano padre, podrían vivir, tal vez, hasta el año 2200. En la Diputación de Cantabria tiene que haber alguien que comprenda que la vida da vueltas y que lo que hoy es prisa, mañana es amor al paseo bajo unos árboles que, por vez primera en España, se pueden morir en casa, y de viejos.

Mónica Fernández-Aceytuno

ABC, Marzo 1998

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